Lo que si se es que todo esto me gusta. Que se siente como se sentía antes ( o mejor). Somos dos iguales, pares. Pasamos por lo mismo. Sabemos lo feo que es todo. Quizás eso también me juega en contra. Su miedo a pasarla mal ( ¿Y por qué no el mio también?). Las pocas ganas que quedan después de tanto tiempo estando mal. Lo entiendo, en algún punto.
Pero en verdad creo, es inútil pensarlo. Ni siquiera se que es lo que quiero, entonces ¿Por qué cuestionarme todo, cuando puedo estar disfrutando del momento y ya? Sentir esas cosquillas, esas extrañas ganas de ir al colegio. Esa incertidumbre. ¿A dónde voy? Amo la idea de no saberlo. Marca perfecto las reglas: hay que jugarse. Hace todo más entretenido, emocionante. Hace de todo esto (que me resulta "poco" en algún punto) una aventura, un camino incierto por el cual camino.
Lo más lindo de todo es ver como voy volviendo. Me dejé reencontrarme con migo misma. Pero con la Agustina de verdad. La que no veía desde comienzos de Diciembre del 2009. Ayer (por primera vez en el año) no apareció. O, sin mentir, apareció muy poco. Casi que no era más que una lastimosa pero vieja historia de amor. Un simple recuerdo, una gran experiencia. Me reí con migo, me reí de mi. Me reí de él y de todos. Y mientras cantaba, bailaba y me ponía más feliz de lo que estaba, me dije "No vale la pena, ahora jugá por esto. Ya está"
Y pensé mucho en lo nuevo. Me vi veinte veces la misma película. Me salían sonrisas de la nada (increíble!!). Pensaba en ese mensaje que me despertó y me hizo sentir diferente. Pensé en esos besos que puede que solo hayan sido importantes para mi. Pero fueron, y estoy convencida que no fueron más de lo mismo para él (porque me dijo que eran más lindos ). Pensé y me cuestioné muchas cosas.
Entre ellas la idea de si estoy haciendo de todo esto un gran suceso, cuando en realidad es pura "gedención" (jajaja). Me pregunto si no estaré idealizando todo. Puede que si. Puede que agrande todo para sacarme cosas (no tan) feas de la cabeza. Puede ser. Pero es todo tan loco. Tantas vueltas da la vida que ya no se que creer.
Ayer me propuse decirle no al estrés de tener que pensar en que carajo voy a hacer de mi vida. Decidí simplemente dejarlo fluir y ver que onda. Dejarme llevar, y disfrutar de cada cosita que pase. Para después no arrepentirme y quererme matar por no haberlo aprovechado. Sólo espero no ilusionarme mucho y que pase lo que tenga que pasar.
"Me gusta. Me da miedo. Me vuelve loca. No es para tanto. Que si. Que no. ¿Y después que? ¿Y ahora?" Basta.
A disfrutar y que dure lo que tenga que durar. (Total, de caídas se bastante)
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