martes, 20 de octubre de 2009

Bless the broken road

Vivía (vivo) en una nube llena de ilusiones. No pasaba nada, pero cada palabra, cada llamado, cada recuerdo, casi todo, hacia más grande lo que sentía. Estaba ciega, ciega por mi ansiedad, por mis ganas, por mi necesidad, por ambición, por mi capricho. Cieguísima, pero aun así, sigo creyendo en que lo que siento (sentía) es único. Creo que es diferente, que se destaca, que no es más de lo mismo, que es otra la historia. Y no se que hacer, que creer. Es verdad o es solamente algo que me impongo para no sufrir? Lo pienso una y mil veces, y no me pasa nada. Hoy digo que no entiendo que me pasó, me acuerdo de lo que sentía y no me cierra. ¿Como fue? ¿Porque? ¿Exageré todo?
Por un lado, creo que fue porque necesitaba que algo me mueva el piso. Necesitaba salir de esa nada en la que estaba. Queria que esa línea tan recta, se conviertiera en un círculo, algo con más movimiento, más vida. Si, a eso voy. Quería vivir. Quería saber que no solo existía para respirar, sino que me pasaban cosas. Que para algunas personas en especial, mi nombre significaba algo.
Pero por el otro (que es el que por un lado más quiero, pero no entiendo) creo que pasó por que no aguantaba seguir guardándome todo. Necesitaba largar todo lo que sentia. Quería que me escuchen. Quería demostrarme a mi misma, que soy valiente. Al menos un poco más que antes. Quería demostrarme que si quiero puedo, no importa lo que pase después. Hise lo que quería hacer y de un día para el otro cambio absolutamente todo. Mis problemas de antes, ya ni aparecían por mi cabeza. La nada constante desapareció.
Y después de algunos días aca estoy. De vuelta en la normalidad. Esa que tanto me molesta, me aburre y me desespera. Termino triste pero contenta a la vez. Triste porque se acabó todo, me quedé sin nada(a pesar de nunca haber tenido algo). Fracasé. En cambio, quedo contenta porque crecí. Creo que nunca crecí tanto como ahora, en menos de 20 días encontré otra faceta de mi misma. Quizas solo fue porque se dio asi, quizas dentro de un tiempo o incluso en este mismo momento, sigo siendo esa cobarde que no hacía nada, que solo se lamentaba.
La ilusión sigue presente. Ya estoy buscando mi otro objetivo. Ya estoy buscando cualquier excusa para que mi cabeza vuelva a escribir otro cuentito que (como siempre) nunca termina como yo lo escribo. Y creo que no hay cosa que quiera más, que no ilusionarme. Si lo se, es imposible. Pero quiero ser un poco más realista. Quiero que un ancla me aferre al piso y tenes que quedarme aca, y no poder salir volando como lo vengo haciendo desde que nací. Quiero sentir que hay un motivo por el cual yo estoy hoy aca en esta habitación escribiendo, por el cual yo estoy en este mundo. Quiero actuar y no imaginar. Quiero que las cosas me pasen, no quiero pensarlas. No quiero pensar en nada. Quiero que la vida me sorprenda. Quiero divertirme.
Quiero sentirme viva.

No hay comentarios: